En el amplio jardín del Santuario de Loyola, se encuentra esta escultura. Representa a Ignacio de Loyola, recuperado tras su convalecencia y ante la Virgen de Aránzazu. El peregrino, como así le gustaba llamarse, había tomado la determinación de ir a Tierra Santa. Había llegado la hora de iniciar el camino.
Que Bonito!!! Recuerdo como si fuese ayer mismo la primera vez que visite Loiola. Sentí una emoción que todavia recuerdo, fue muy hermoso.
ResponderEliminarCacio